domingo, 2 de enero de 2011
Noche
viernes, 15 de enero de 2010
Garbage
miércoles, 23 de diciembre de 2009
plástico cien por ciento resistente

lunes, 14 de diciembre de 2009
Thelma
Luego de algunos minutos, Thelma llega a entender que aquellas sombras a las que le teme solo forman parte de su alma. Son aquellos fantasmas internos que desde hace meses se instalaron en su corazón.
La noche es hermosa.
Las estrellas se asemejan a cristales que brillan en aquella infinidad que acompaña a la muchacha. Embelesa sus sentidos contemplado la nada... y el todo… mientras toma un yogurt de vainilla.
Piensa, piensa mucho como de costumbre. Piensa como continuará su vida.
Pero esta vez elige no volar, no soñar, evita ser atrapada por aquellas fantasías que sólo llegan a existir en su mundo de ilusiones, bastante feliz, por cierto, muy distinto a su mundo real.. Solo piensa.
lunes, 12 de octubre de 2009
martes, 29 de septiembre de 2009
viernes, 29 de mayo de 2009
Su corazón se pudrió hace tiempo, lo dejó abandonado entre fotos viejas e hilos de seda.

Aquella pelirroja
de botas de cuero brillante
desde niña soñaba con vestir minifaldas coloradas de cuero
y en su adolescencia, su sueño abandonó sus fantasías
para formar parte de sus días
Trabaja en el prostíbulo de la calle 23 de New York City
Y ahora pretende enamorarse
Pero su corazón ya se pudrió hace tiempo
Y enamorarse de aquella, no lo creo
Está bastante deteriorada y nadie la toma en serio
Es la puta del barrio, la más barata, fuma todo el día y su piel está opaca y grisácea como el humo del cigarrillo.
Infortunada pelirroja, no todos gozamos de una vida bella…
lunes, 11 de mayo de 2009
domingo, 11 de enero de 2009
sábado, 10 de enero de 2009
Fal-se

lunes, 29 de diciembre de 2008
Sólo no quiero ir sola
Vamos al parque a mirar la luna, me dijo.
Dale si.
Y a comer palomitas de maíz.
No, le dije, prefiero comer un chori choripán!
Pero a mi no me gusta el choripán, me dijo, lo sabés..
Probalo, no podés hablar sin haberlo probado. Me encantaría que te gustase, sería todo tan diferente entre nos.. Podríamos, por ejemplo, ir al parque a mirar la luna, andar en bicicleta, correr desnudas, sólo correr desnudas por la playa en vacaciones…pero siempre querés que comamos lo que vos querés.
Sé que sería todo muy diferente, pero me niego a degustar su sabor. Me quedo con las palomitas de maíz de-fi-ni-ti-va-men-te, sin vuelta atrás. Si no voy al parque a mirar la luna y comer, mientras, palomita de maíz con vos…, ya invité a Merlina, sé que a ella si le gustan, y estoy esperando a que conteste mi msj. Me da lo mismo con quien voy, sólo no quiero ir sola.
martes, 16 de diciembre de 2008
Artefacto de iluminación

Me venden por Mercado libre. De carácter escultórico, innovadora, ideal para ambientes excéntricos y modernos. De alto potencial de luminancia. Lo último en el rubro de iluminación. Cómprenme!
Ya no siento, sólo ilumino.
jueves, 27 de noviembre de 2008
No recuerdo su nombre
Su melena parece ser agitada por el viento, como la de una infalible rockera de los años 80. Usa minifaldas rojas de charol, y trabaja en un pequeño burdel que se encuentra entre las calles de Manhattan, oculto, casi invisible, al lado del Chelsea hotel.
Sentada sobre un viejo sillón de cuero, con un cigarrillo entre sus dedos, el humo forma figuras en el aire hasta llegar a perderse entre sus revoltosos cabellos. Allí espera, con su mirada perdida que desprende una mezcla de sensualidad y melancolía.
Estuve con ella hace un par de semanas, pero no recuerdo su nombre.. (y es lo que menos me importa).Lo que si recuerdo es que es muy buena en la cama...el placer que provoca aquella pelirroja es exorbitante. Es como volar desnudo entre gotitas frescas de lluvia, en una tarde calurosa de Nueva York, pasando por el Central Park, sintiendo solo el aire húmedo.
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Me contaron, que dejará su profesión para dedicarse a lo que realmente ama: 'cantar canciones de amor'
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Tiene una bonita voz, por ahí tararea suave, melodías de John Lennon… A pesar de ello, no creo que llegue a recaudar tan buena cantidad de dinero como la que gana en aquella taberna, la más solicitada entre las prostitutas del local. Muchos de lo que frecuentamos visitarla hubiéramos preferido que no se dedicara a cantar canciones de amor, o por lo menos, que no abandonara su profesión por ello.
lunes, 17 de noviembre de 2008
miércoles, 22 de octubre de 2008
Un grillo amarillo
Encontré un grillo amarillo sentado en una hoja amarilla. Estaba escuchando the velvet underground, pale blue eyes. Pasé por donde estaba sentado el grillo amarillo, debajo de un lapacho de flores amarillas. Me invitó a sentarme junto a él a fumar marihuana. Acepté su invitación.
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Intenté averiguar el nombre del grillo amarillo, porque él no habla, solo canta, y canta pale blue eyes. Cerca de donde se encontraba, vi un papel tirado en el piso. Lo levanté y leí lo que llevaba escrito: mi nombre es Juan.
El grillo amarillo escribió su nombre mientras yo fumaba y escuchaba the velvet underground, porque el no habla, pero si canta y también sabe escribir.
El grillo amarillo se llama Juan.
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Juan saltó hacia la copa de un lapacho de flores amarillas, estaba sentado en una de las ramas más altas del árbol. Yo pasaba por ahí. Me invitó a sentarme con él y me dijo:
- Volemos juntos
- Volemos juntos- le dije. Acepté su invitación.
Ella es Julia

Se aloja desde hace unos meses en el hotel Chelsea. El hotel, es un hervidero de artistas, drogas y rock and roll.
Ella protagonizó algunos de sus videos; yo participé en las escenas que fueron filmadas en The Factory.
Nos encontramos una noche mientras deambulaba borracho por las calles de Nueva York. Fue cuando salí de Chelsea, después de tocar con mi banda, cuando conocí a Julia. Se hallaba como un mendigo sobre un pedazo de cartón, y en ese instante supe que ella era el amor de mi vida. Esa niña de botas de cuero brillante y corté carré, cambió el rumbo de mi miserable existencia.
Se veía tan tierna, su espalda descubierta pedía con ansias que me acercara a ella. Le di mi mano, ella levantó su mirada, sus ojos sollozaban. Le pregunté si algo le ocurría o en que podía ayudarla; me contestó que recién llegaba a NY, que sus padres eran una mierda, y que estaba sola. Mientras me hablaba miraba su boca, tan hermosos eran sus labios mientras articulaba cada palabra, pero contuve mis deseos de besarla.
La levanté y le dije que podría acompañarla a un hotel bastante agradable que se encontraba a pocas cuadras de allí. Ella aceptó. Mientras caminábamos pude acariciar su espalda. Hacía tiempo que no sentía lo que en esos momentos Julía producía en mí, tocó sorpresivamente aquello que estuvo escondido entre tela de arañas por años, o quizás por siempre.
Llegamos a Chelsea, le agradó el lugar. Como contaba con poco dinero, le ofrecí algo del mio asi pudiera hospedarse unos días allí hasta que resolviera que iba a hacer de su vida en esta ciudad, extraña para ella. Lo aceptó con una sonrisa, tímida; estaba bastante callada, pero de su mirada, múltiples sensaciones y palabras fluían por sí solas, algunas por cierto, inexplicables.
Cuando me dirigí hacia la puerta del hotel, me llamó vacilante preguntándome si querría acompañarla esa noche en el albergue.
Aquella mujer cambió el rumbo de mi puta existencia, y lo peor (o mejor, quizás) fue que a pesar de las ganas tremendas que tuve que guardar dentro de mi conciencia, de mis sueños, y por debajo de mis pantalones para otro momento; a pesar de la abstinencia que viví esa noche en la cama de aquel hotel acostado a su lado, con su espalda descubierta, acurrucada como una niñita con deseos de cariño, a pesar..., me gustó compartir esa noche junto a ella. Asi fue. Me convirtió en un verdadero tarado. Nunca antes me acosté con una mujer sin cogerla. Nunca antes me sentí bien sin coger, sin drogarme o emborracharme (o si aquello ocurrió, no lo recuerdo), mi mundo giraba en torno a ello, además de la música, mi único amor hasta esa noche en que conocí a Julia... entre medio de luces parpadeantes y pedazos de cartones viejos
miércoles, 15 de octubre de 2008
Mi primer amor: Felipe
Ese chico con la cara llena de granos,
Gafas negras de marco grueso,
Frenillos en su dentadura torcida
Ese chico me enamoró.
El tenía 12 años
Y yo 9.
Yo era la niña mas linda de la escuela
Él era mi vecino de al lado.
Todas las siestas iba a casa a buscarme para ir a jugar
Yo salía contenta.
Primero me ponía coqueta
Algún vestido de esos con flores me gustaba lucir.
Él me decía que le excitaba como me sentaban los vestidos.
Y a mí me gustaba excitarlo.
Yo no sabia que significaba esa palabra
Pero el me explicó como se sentía estar excitado
Me decía que su pajarito se ponía contento al ver mi vestido que mostraba mis pechuguitas salir del escote (ya desde niña tenía pechos prominentes).
Y a mi me gustaba alegrar a su pajarito.
Por eso me gustaba excitarlo.
Solíamos andar en bicicleta por el parque
Y luego cuando anochecía volvíamos a casa.
Él, muy caballero y galán, me acompañaba a la mía
Y antes de entrar me pedía que acaricie a su pajarito (Felipe se llamaba)
Felipe era muy tímido, por eso se escondía debajo de su pantalón.
Entonces, antes de entrar a casa, acariciaba a Felipe.
Pero un día mi mamá nos vio, y se enfureció.
Llamó a la mamá de mi chico y le dijo que su hijo era un degenerado, un depravado sexual.
Yo no entendía nada.
Después de ese episodio nunca más volví a andar en bicicleta con mi vecinito, mi primer amor, mi único amor, nunca más acaricié a Felipe.
Cuando crecí, y mis pechos crecieron y mis vellos también crecieron, me di cuenta que mi vecino fue un tremendo mentiroso.
Lo que hay debajo del pantalón de un niño no es un pajarito.
Lo pude comprobar con mis propias manos, con mis propios ojos, con mi propio cuerpo y con mi propia boca.
Me engañó, jugó con mi inocencia de niña buena.
Abusó de mí, fue un degenerado, un depravado sexual. Mi mamá estaba en lo cierto
Pero no me arrepiento de haber acariciado a su “pajarito Felipe”, como a él le gustaba llamarlo. No me arrepiento.
Yo también me excitaba (con razón mi bombachita siempre terminaba mojada después de acariciarlo).